Un aspecto del calvario que se autogeneró se terminó. Al menos logró culminar ese encierro de la realidad, esa privación de la libertad que se extendió durante casi diez días. Morena Rial continúa inmersa en una investigación policial por su participación en un grave delito.
La influencer admitió delante de un juez, sentada durante tres horas, que formó parte de la banda que irrumpió ilegalmente en una propiedad en Villa Adelina y robó pertenencias de una familia, que se encontraba de vacaciones durante esa noche.
En definitiva, Morena abandonó la comisaría en la que permaneció tras las rejas en la noche del jueves, así se trasladó a la casa de su hermana Rocío, que le garantizó cobijo en su hogar del barrio porteño de Colegiales. Toda esa salida captó la atención de los medios que montaron guardia en la dependencia policial y en el edificio de la otra hija de Jorge Rial.
Justamente, en la puerta de esa torre se produjo el contacto del conductor de C5N con la prensa, en el momento que se acercó a llevar a su nieto Amadeo, que se encontraba bajo su custodia desde la detención de Morena. Así, el famoso expresó algunas concepciones de todo este embrollo.
JORGE RIAL OPINÓ QUE SU HIJA TIENE QUE PEDIRLE PERDÓN A LAS VÍCTIMAS DE SU ROBO
En ese diálogo con las cámaras y los micrófonos de toda la televisión argentina, Jorge expresó el urgente pedido que debería ejecutar su hija con las víctimas del robo. Toda una frase resonante, que rebotó en el aire. El conductor manifestó con vehemencia: “Igual no necesita mi perdón, en todo caso tiene que buscar el perdón de los que dañó haciendo lo que hizo”.
Visiblemente conmovido, Jorge también describió su estado emocional: “La pasé muy mal, estoy muy cansado física y mentalmente. Es mi hija, ¿cómo no la voy a perdonar? La verdad la pasé muy mal, estoy muy cansado, estoy agotado físico y mentalmente, pero la voy a perdonar«.